Design thinking: descubre el método que puede ayudarte a revolucionar la ley

En el sector jurídico es posible identificar varias oleadas de renovación que trajeron un intercambio más o menos intenso con otras áreas del conocimiento. Un movimiento relativamente reciente, impulsado por una creciente demanda de mayor eficiencia y simplificación, es el uso de metodologías y técnicas de diseño para el desarrollo de productos y la prestación de servicios legales.

Aquí vale la pena recordar la opinión de Herbert Alexander Simon de que el diseño es un proceso o método a través del cual uno cambia o ajusta el curso de una situación actual para resolver un problema. Ser diseñador, por lo tanto, significa, en una de sus concepciones, alterar, cambiar o ajustar el curso de una situación actual.

Una metodología ampliamente utilizada por los diseñadores y que tiene una sólida aplicación a los servicios y productos legales es el design thinking. Este enfoque es famoso por tener una perspectiva muy centrada en las personas y en la experiencia del usuario, lo que permite una organización segura y eficiente de los procesos creativos.

Esta lógica centrada en el usuario también es una de las formas que usa netLex para estructurar flujos de trabajo más eficientes. Comprenda ahora cómo aplicar esta lógica a su trabajo y domine sus flujos de trabajo en nuestra guía exclusiva.

Empresas grandes y relevantes de todo el mundo utilizan esta metodología para mapear desafíos y resolverlos. Ya que existen estudios que señalan que el design thinking es capaz de incrementar el rendimiento de las empresas.

Pero, ¿cómo funciona el design thinking?

Design Thinking es un proceso intencional para llegar a lo nuevo. Es una metodología (o una idea, estrategia, mentalidad) que organiza el flujo creativo para permitir el desarrollo de nuevas soluciones a problemas y desafíos. Puede ser utilizado en cualquier área y rama de actividad, especialmente en el Derecho.

Segundo a IDEO, o design thinking promove uma mudança de mentalidade, trazendo maior foco no ser humano (human centered), colaboração, otimismo e experimentação. E o faz por meio de cinco fases:

Estos pasos, en definitiva, implican la comprensión por parte del usuario de la solución que se va a desarrollar y sus dolores. En base a este entendimiento, se define el desafío a resolver y se enumeran tantas ideas como sea posible. Posteriormente, se evalúa qué es ejecutable (deseable, practicable, viable) y se desarrollan prototipos, que en el futuro serán probados con los usuarios y mejorados en base al feedback recibido.

El proceso creativo desarrollado con el apoyo del pensamiento de diseño implica aceptar los errores, percibiéndolos como nuevas oportunidades de aprendizaje y crecimiento. De ahí su relevancia para la promoción de un entorno innovador en el Derecho.

Desde esta perspectiva, el uso de la metodología de Design Thinking en el ámbito legal permite sumar a este sector tan relevante los pilares de (i) enfoque en las personas, (ii) colaboración e (iii) interacción, a través del diseño técnico y metodológico. 

Obtenga más información sobre cada uno de estos pilares a continuación:Obtenga más información sobre cada uno de estos pilares a continuación:

1. Enfocarse en las personas, porque se enfoca en resolver los problemas que enfrentan y es a través de la superación de estos desafíos que se crean nuevos productos, se desarrollan y mejoran los procesos, se brindan servicios y se establecen nuevos modelos de negocios.
   
   
2. Colaborativo, porque se produce a partir de un proceso mutuo de aprendizaje y formación práctica. Así, resulta de la interacción entre el prestador del servicio (el que desarrollará la solución) y el usuario, quien debe ser escuchado y es la razón misma de lo que se desarrolla (el que enfrenta el problema, tiene algún inconveniente).
   
   
3. Interactivo, porque se desarrollan ciclos rápidos de ideación y prototipado que se basan en la validación del usuario. La solución se construye con retroalimentación y mejora continua de lo desarrollado (o del servicio prestado).

Es precisamente para contemplar y cumplir con todos estos pilares que el design thinking se desarrolla por etapas. Primero, un viaje de empatía (o descubrimiento), en el que se busca analizar y comprender realmente el problema a resolver (el dolor del usuario).

Una vez entendido el problema, es necesario definir el ámbito de actuación, al que sigue una etapa de ideación. En esta fase, imagina y crea libremente múltiples e innumerables enfoques posibles del problema.

Entonces necesitas construir la solución. Esta fase, denominada prototipado, es el momento en el que se desarrolla el producto o servicio para solucionar el dolor del usuario. Finalmente, necesitas probar y probar. Presentar el prototipo al destinatario, recogiendo sus sugerencias y feedback para mejorar lo ofrecido. Es la fase en la que se descubre si el producto o servicio realmente es una solución a los problemas del cliente.

Una nueva forma de pensar en los servicios legales

En este texto aprendiste un poco más sobre la metodología del Design Thinking, cuyo foco es el usuario final del servicio, sus dolores y objetivos.

Estos enfoques están destinados a crear soluciones legales innovadoras que las personas necesitan. Son diferenciales que pueden desarrollar los profesionales del derecho en las más diversas áreas y etapas de carrera.

En el siguiente texto de esta serie introduciremos el concepto de Derecho Visual y explicaremos el secreto de la escalabilidad de esta nueva forma de estructurar los documentos jurídicos. ¡Este atentos a nuestras redes sociales!

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